18/2/15

ENVIDIA.... DE LA BUENA ?







Quien no ha sentido alguna vez en su vida envidia, desde chiquitos este sentimiento nos alcanza y a veces ni siquiera sabemos el porqué, envidiamos tantas cosas que a veces se nos olvida por donde empezó esto.

¿Y qué es la envidia? bueno por ahí hay una frase que algunas personas dicen, y que a mí personalmente nunca me ha quedado del todo clara, “le tiene envidia de la buena” y todavía se me complica más entenderla, ya que según los expertos envidia es un sentimiento o estado mental en el cual existe dolor o desdicha por no poseer uno mismo lo que tiene el otro, sean bienes, cualidades superiores u otra clase de cosa. También dicen que es como tristeza o pesar del bien ajeno, o como deseo de algo que no se posee. Como si el sentir envidia pudiera catalogarse como buena o mala, o en graduaciones. Yo no sé, pero para mí la envidia es envidia, es desear lo que el otro tiene y punto.


El objetivo final de la envidia es siempre el mismo, tener más de lo que se tiene, o desear  lo que el otro tiene, ya sea en el plano material o emocional.



Y por eso no me checa envidia de la buena,  a ver que te parecen estos ejemplos:

 “me da gusto que pudieras comprar esa hermosa casa, pero internamente y de muy buena forma, me hubiera gustado que no lo hicieras, o que mejor hubiera sigo que yo la tuviera y no tu”

O” tiene una esposa muy bonita,” pero –internamente – ella estaría mejor conmigo digo pesando en envidia de la buena.

Y que te parece este: “Qué bueno que te dieron la gerencia a ti –pero internamente y muy envidia de la buena -  desde luego que yo hubiera sido mil veces mejor que tu. 


Y lo importante de esto, lo que realmente debemos rescatar, es que el hecho de sentir envidia, nos coloca en una situación de insatisfacción, porque cuando envidiamos algo, es porque seguramente no lo tenemos –o no en la medida que quisiéramos-, y esto por lo tanto nos hace sentir infelices, insatisfechos, y hasta tristes. 


Esto en el mejor de los casos, pues habrá ocasiones, circunstancias, personas y momentos, en que la envidia va “corroyendo” el alma provocando en algunas personas verdaderos estados de desesperación,  odio y sentimientos negativos muy profundos. Quizá alguno de uds. recuerden al amigo/, vecino/o o conocido que con el tiempo, su única forma de salir de la apatía es recordar constantemente en lo que tiene su objeto de envida, es decir, en lo que tienen y hacen los otros, y esto le impide moverse, a  buscar sus propios proyectos o sueños, y se dedican a vivir rumiando a través de lo que tienen los demás. Claro estos ya son extremos de envidia y ya estaríamos hablando de algún proceso neurótico que debiera ser tratado por un profesional.



Ahora bien, así como en el caso de  algunas situaciones que con una buena dosis nos impulsan a crecer, a superarnos y a querer aspirar a mas, la envidia en dosis pequeñas, definitivamente nos impulsan a luchar por aquello que envidiamos-queremos- y en ese sentido es mi deber decir que todos padecemos en mayor o menor grado de envidia, y eso es completamente normal.  Aquí lo importante es que SÍ LA RECONOCEMOS podemos de alguna forma equilibrarla, regularla, y trabajar sobre ella. Lo contario  como mencione, a la larga puede enfermar a nuestro organismo


Por lo anterior, es fácil, darse cuenta que la envidia así como los celos, el resentimiento, la vergüenza, la culpa  están considerada dentro  de las emociones negativas, y que cualquier emoción negativa que nosotros tengamos en nuestra mente, influye directamente en nuestro comportamiento cotidiano, pero sobre todo independientemente de esto, nos causa un malestar indirecto que sin darnos cuenta, sin percatarnos de ello navegamos con eso día a día,  luego no podemos darnos respuesta a es dolorcito de cabeza, a ese malestar estomacal, a esa molestia cotidiana.



…Y Como hacerle? 


Pues como siempre aconsejo, date una pausa, y trata primero de honestamente aceptar que tienes envida por algo o alguien, ese como en todos los casos es el  paso más importante para poder manejarla.



Tienes “envidita” de la buena, pues ya te diste cuenta que de esa…¡ NO HAY !




Entonces:

 * Comienza por valórate, cree en ti, tú puedes obtener también cosas ( y para empezar quiero que recuerdes algo que hayas obtenido por merito propio, del cual te hayas sentido muy orgulloso/a)



* Aprende del otro en lugar de quedarte envidiando lo que tiene. Si miras el éxito o lo que deseas de esa persona, también piensa en sus fracasos a veces nos concentramos exclusivamente en lo que los otros tiene, sin mirar el  esfuerzo que se ha tenido que hacer para poder llegar a donde están o  lo que tienen.

* Otra cosa importante es darnos cuenta de nuestra realidad a veces no es la más bonita la más deseada, sin embargo ES nuestra realidad, y de esta forma convencernos de que eso es lo que nos toca vivir y tener.  Saber adaptarnos a eso pero sobre todo tratar de ser felices con eso, así nos toco vivir tan simple y llanamente, rescatar desde luego lo que tenemos sea poco o mucho, y disfrutarlo agradecerlo, y sí ¿por qué no? luchar por alcanzar en la medida de nuestras posibilidades y paso a pasito algo más. 


Has de saber que los envidiosos no gozan de su propia vida de sus logros en los aspectos favorables –por mínimos que sean a sus ojos – que todos tenemos. El envidioso/a no valora sus cualidades logros y progresos, y por lo mismo  va aniquilando su crecimiento, ya que como habrás concluido la envidia ni siquiera se convierte en un motor impulsor del comportamiento, el objeto deseado no se traduce en objetivos a alcanzar sino simplemente en una actitud de apatía y queja constante por lo que no se tiene.



* ¿Cuestiónate el porqué sientes esa carencia o necesidad? ¿pregúntate si realmente necesitas eso que envidias?  existe una diferencia enorme entre necesitar y desear que con frecuencia  olvidamos y es verdad  hay muchas cosas que nos gustaría tener pero que realmente no necesitamos.


*Por último, algo de lo que frecuentemente aconsejo en mis consultas: Concéntrate en ti refuerza constantemente tu autoestima  considera que eres merecedor de lo que deseas en la vida focalízate en desarrollar tus capacidades y claro esta forma es la vía más segura y directa para conseguir el éxito y la felicidad. 


¡¡Y bueno ya me voy porque ya mero sale mi vecina, y quiero ver los zapatos que trae el día de hoy, para copiárselos y comprarme unos iguales….!!

Psi. GCuadra

3 comentarios:

  1. http://elpais.com/elpais/2013/05/17/eps/1368793042_628150.html en este link, me encontre lo de aqui abajito, esta bueno el articulo.

    ¿Y qué hay de la envidia? ¿Cómo se trasciende? Muy simple: dejando de demonizar el éxito ajeno para comenzar a admirar y aprender de las cualidades y las fortalezas que han permitido a otros alcanzar sus sueños. Si bien lo que codiciamos nos destruye, lo que admiramos nos construye. Esencialmente porque aquello que admiramos en los demás empezamos a cultivarlo en nuestro interior. Por ello, la envidia es un maestro que nos revela los dones y talentos innatos que todavía tenemos por desarrollar. En vez de luchar contra lo externo, utilicémosla para construirnos por dentro. Y en el momento en que superemos colectivamente el complejo de Solomon, posibilitaremos que cada uno aporte –de forma individual– lo mejor de sí mismo a la sociedad.

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    1. el articulo que sugiero le den una leída, te da una excelente perspectiva, de el pais la liga esta aquí arribita

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  2. a conformidad es el proceso por medio del cual los miembros de un grupo social cambian sus pensamientos, decisiones y comportamientos para encajar con la opinión de la mayoría”
    (Solomon Asch)
    muy buen articulo

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