13/1/20

ESTE SERA EL MEJOR AÑO DE MI VIDA







¡¡Que voy a hacer!!

Con mi vida, con mis cosas, con mi tiempo, con lo que tengo y también con lo que no tengo, con lo que quiero, con lo que no me gusta, con tantas y tantas cosas que tengo en la cabeza y que se arremolinan queriendo salir -unas- y desaparecer otras.
Bueno, yo creo que primero lo primero
 ¿qué quiero?
 ¿qué me gustaría?
 ¿Como me gustaría verme, sentirme? –no en cinco años; como cuando te hacen esta pregunta en una entrevista de trabajo – porque en 5 años ya voy a tener un titipuchal de años, ¡y ya pa’ que! No esto es ahorita, esto es de ahora

, ¿cómo me gustaría verme dentro de un par de meses? o mejor aún ¿cómo me gustaría verme y sentirme mañana mismo? Y aunque no fueran muchos los años, aunque aún estuviera en la “flor de mi juventud”, esto creo yo, también apremia, esto “urge”. -Y más a mí por supuesto. -

Luego entonces, lo que necesito es eso, saber, pero y…
 ¿cómo sè?
 ¿Cómo me entero de lo que quiero? pues así de fácil, muchas veces las personas se dicen lo que no quieren, por ejemplo, no quiero hacer ejercicio, no quiero leer, no quiero estar triste, no quiero no sé cuántas cosas, y ahí se quedan estancadas, Ahora lo que yo voy a hacer es “voltear” al revés.

¡Que sí quiero ¡

 y así voy a hacer mi lista; primero sin ton ni son, sin prioridades, sin pensarlo mucho, y voy enumerándola, 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8, 9, 10.

Para empezar 10 cosas no son muchas, tampoco poquitas, pero yo creo que es un buen número de arranque. Luego ya con más calma, las vuelvo a releer y las empiezo a acomodar conforme sienta cuales van primero y cuales al último. Con cuales me siento bien, cuales realmente me harán moverme y hacerme poner a la acción. Puede que algunas las quite, y a su vez otras agregue, el chiste es tener algo por dónde empezar, tener algo por donde movernos.
¡¡Vamos bien, si verdad!! Bueno ¿ahora qué?

Pues por ahí mismo en la misma lista habrá cosas proyectos y situaciones inacabadas, a esas en especial hay que ponerles atención, porque esas exactamente son las que no nos permiten movernos, son las que nos boicotean, son las que están constantemente ocupando un lugar en nuestra mente, y ni nos permiten avanzar, ni dejarlas ya por la paz, son como esos mosquitos zumbones que andan merodeando en la noche y no te dejan dormir en paz.

Por ejemplo, ese cuarto que esta todo desordenado desde quien sabe cuándo y todos los días pienso, hoy si lo voy a ordenar, pero rete bien
 O la mentada dieta de toda la vida, hoy si la voy a hacer bien para poder sentirme ídem, o voy a terminar de leer el libro que empecé… ya no me acuerdo cuando, o que te parece hablarle a fulanita de tal, porque dese cuando tengo deseos de hacerlo, o porque no apuntarme a ese curso que tanto ha llamado mi atención y al que creo que por tiempo, dinero y esfuerzo lo he ido postergando.

Yo creo,
- y esa es mi sugerencia- que primero hay que ir acabando poco a poco con esos proyectos, situaciones o cosas que hemos ido dejando y tratar de cerrarlas, porque solo están ocupando un espacio en mi mente y son como una basurita en los ojos, o como una caja en medio de la estancia luego entonces hay que cerrarlo definitivamente, y así nuestra mente tendrá más espacio para poder proyectar lo que realmente queremos.

Y con esto me refiero a que, si ese libro solo está frenándote, una de dos, o le dedicas el tiempo necesario para terminar de leerlo, o decides ya guardarlo y no pensar más en el
.
Si tienes muchos kilitos de más, proponte en un tiempo determinado – en dos meses- voy a bajar 5 kilos – ya veré más adelante si vuelvo a proponerme bajar otros 5. De poco en poco, no te pongas metas estratosféricas, así te sentirás mejor contigo mism@.

Ese cuarto me quita mucha energía, porque ni lo ordeno bien, y solo lo hago por encimita, únicamente lo básico, pero voy a proponerme hacerlo BIEN de una buena vez. A mí me funciona, decir, -con reloj en mano le invierto 2 o 3 horas a esto, sin dedicarme a otra cosa, solo a eso, y ¡deberías ver como avanzo!
Te fijas que fácil, - ¿a poco no? – el chiste es organizar nuestra mente, nuestro tiempo y nuestra disposición. Está comprobado que dedicar unas horas a planificar lo que vamos a hacer te ahorra mucho más tiempo en el futuro que estarlo posponiendo.
 ¿Por qué estarás de acuerdo en que estamos haciendo de todo un poco, y ni nos centramos en nada ni terminados nada?, y a la larga eso solo nos va dejando la sensación de no aprovechar el tiempo, pero más importante, va mermando nuestra capacidad de poder sentirnos satisfechos con nosotros mismos.

 Aunque no lo creas – pero por favor créetelo - estos pequeños logros marcaran una enorme diferencia en nuestra percepción sobre nuestra autoestima y la seguridad que sentimos hacia nosotros.

- Yo misma a veces me he sentido fatal, inútil, irresponsable, desmotivada haragana y hasta sin ganas por no terminar lo que debí haber hecho hace tiempo.

Y te voy a decir una cosa, existe una diferencia enorme entre comprometerse al 100 y comprometerse al 95, porque cuando te comprometes al 95, siempre estarás buscando una excusa para no cumplir tus intenciones, mientras que cuando te comprometes al 100, tú mismo cierras –inconscientemente – todas las puertas de salida.
Por eso te digo, si de verdad quieres progresar en cualquier área de tu vida, lo más importante es que te centres exclusivamente en lo que te propusiste hacer y terminarlo al 100.
En mi opinión, ese compromiso es el comienzo de cualquier final exitoso.

Hay algo que te –nos- puede ayudar, mira, acabo de leer un libro en donde se habla de Sistemas en vez de objetivos, y me pareció muy interesante y práctico para poder seguirse. Y dice algo así:

Un Objetivo, es un resultado, mientras un sistema es un proceso.
Por ejemplo:
Ser Gerente es un Objetivo, Trabajar todos los días es un sistema.
Ganar el campeonato de Natación es un objetivo, Ir a entrenar 4 días por semana es un sistema.
Terminar una carrera (profesión) es un objetivo. Ir a la escuela todos los días, es un sistema.
Bajar 15 kilos es un objetivo. Alimentarte y ejercitarte adecuadamente es un sistema.
Si te das cuenta los sistemas dependen exclusivamente de ti, y hacen que te centres en el camino, no en el resultado. Luego entonces si estableces buenos sistemas, lo demás se dará solo.
Y si, es necesario aclarar que: Con buenas intenciones a veces no basta, es necesario –y tú bien que lo sabes- proponerlos algo y TRATAR por todos los medios de cumplirlo, encontrarle lo bonito, y cuando veamos que estamos otra vez por el camino de no hacerlo, rescatar lo que en un inicio nos hizo darle peso y apoyarnos en eso, esto es tratar de encontrarle la emoción que en un principio nos llevó a hacerlo.

Si empezamos con cosas pequeñitas, sencillitas y las vamos terminando, esto nos hará sentirnos seguras satisfechas competentes. Así, poco a poco podremos ir aumentando cada vez más, y llegara un día en que sin darnos cuenta hemos avanzado un buen trecho apenas sin darnos cuenta.

¿Tú qué piensas de esto? me encantará saberlo.?
Te mando un abrazo muy afectuoso de inicio de año.
PsiGCuadra