21/10/15

aromas que enamoran





 






Mmmh ¡quién no se ha enamorado del  aroma de un bolillo recién hecho!

su olor, 

su textura,

 su sonido crujiente,

 incluso si están calientitos, mmmh ¡

En alguna ocasión iba yo tan contenta de haber llegado exactamente en el momento en que sacaban las charolas con los bolillos calientitos, que compren muchos de mas y en el trayecto hacia mi casa, iba regalándole uno a cada uno de mis conocidos, la reacción obviamente. era primero de asombro, -quien anda por ahí por la vida regalando bolillos -pero en seguida, de un placer inigualable al poder comer un crujiente y calientito bolillo.


Qué me dices de la tierra mojada, te habrás dado cuenta cuando riegas las flores de tu casa, -en la mía hay muuuchas- y si- cuando las riego su olor es delicioso.

En mi caso no es necesario que yo ponga especial atención al hecho de oler la tierra mojada, pese a que riego aproximadamente cada dos días las plantas de mi casa, tanto las del interior así como las del exterior, SIEMPRE, PERO SIEMPRE SIEMPRE, disfruto Ese olor característico a tierra mojada.


Y no me mencionen uno de mis temas favoritos LA LECTURA ¿ sabias tu que las personas en promedio en México leen unos 2 libros al año por persona ?  

Yo creo que yo me “echo” hasta 10 libros al mes, amén de toooodos los artículos, post, que caen en mis manos.

Es por eso que aquí en el blog, pensé en dejar algunas de mis lecturas, que ahora te recomiendo, para que comiences a leer algo ligerito o   profundo según sus gustos y necesidades.

A mis hijas les leía, de todo, dese chiquitas, y con el paso del tiempo, se hicieron amantes (quizás) más que yo de la lectura, de hecho por ahí hay una siembra de libro , en la que hemos participado muy emocionadas cada año, la cual consiste en “DEJAR OLVIDADO UN LIBRO”, ya sea en el camión, en el metro, en un parque, o en un café, con una nota adentro que diga que estas sembrando-donando este libro, y que es uno de tus preferidos, y precisamente por eso lo compartes para que otra persona también goce de el, y lo invitas a que el próximo año, por las mismas fechas haga lo mismo, y deja “olvidado” un libro en algún lugar.

En verdad, fue tan emotivo el primer día-año  que lo   hicimos, que parecíamos niñas chiquitas con juguete nuevo, pensando primero en que libro donar, luego en qué lugar lo íbamos a dejar, por último, al despedirnos del , y luego imaginar la cara de sorpresa que tendría la persona que se lo encontrara.   ¡¡UFFF!! En verdad todo un ritual HERMOSO.

Pero nada como el olor de las hojas de un libro nuevo, porque además de saber que voy a leer algo que me construye, que me deleite con su contenido – EL QUE SEA – su olor característico, mmmh, en este momento que lo estoy escribiendo , lo estoy percibiendo, mi mente lo está trayendo a mis recuerdos y lo vuelvo a disfrutar. –desde luego indescriptible-

Ese cafecito, no solo mañanero, existen muy buenos momentos alrededor de una exquisita taza de café, tantos que sería injusto de mi parte mencionar solo uno. 

Pero si te diré algo;  un buen café de la olla con una rajita de canela   endulzado con piloncillo…
si  que me lo tomaba ahorita… ¿Tú no?

¿Qué te parece si me-nos compartes algún momento que te haya recordado cualquiera de estos maravillosos aromas?

Pero estaría padre que fuera de más de dos.

¡Anda Dímelo por favor! ¡

Tendrás verás olerás y sentirás sensaciones muy placenteras.

Yo te lo aseguro.

Y un oloroso y rico abrazo te sigue el día de hoy.

Psi.GCuaDRA