Los docentes están a punto de iniciar el ciclo escolar más
difícil de su carrera.
-recordemos que la
escuela es un espacio de aprendizaje y socialización, muy necesario- pese a que
muchos no están convencidos de este regreso.
Y debido a la situación que hemos pasado, habrá desde luego
muchas dudas, incertidumbres, miedos, alegrías enojos sorpresas desconfianza
temor y una serie de emociones que en ocasiones no se podrán manejar de forma
adecuada, tanto de profesores, así como de alumnos y padres de familia.
A todos lo involucrados y cada uno de ellos, mi deseo es que
sea lo más sano posible en todos los aspectos, y que cada parte asuma la
responsabilidad que le corresponde al afrontar
nuevos retos, nuevas vivencias nuevas experiencias y formas de resolver. Será entonces crucial el mantener cuidado
comprensión y apertura para este nuevo reto
-importante y necesario-
. En este sentido, la evidencia nos dice que las normas sencillas, que la gente
sea capaz de seguir sin pensar demasiado, han resultado muy útiles. (esto con
el afán de no embrollarnos en una serie de indicaciones que finalmente o no se
siguen o implican mucha mayor energía y tiempo, que a veces no se tiene por
consiguiente no se cumplen)
Tan simples como:
Aprender a utilizar y aceptar el cubrebocas
y
Enseñar a ser responsable conmigo y con los que me rodean.
Adecuar mis acciones a una sana distancia
Lavado o desinfección frecuente de manos.
Ventilar las áreas de exposición.
…
En este nuevo proceso
de adaptación- aprendizaje en el cual todos debemos participar
será necesario estar pendientes tanto los docentes, cuidadores como padres de familia, atentos a cualquier tipo de indicador que se presente en nuestros queridos alumnos, tales como ideación suicida, llantos
conductas lesivas, descuido en su presentación e higiene personal, impulsividad y agresividad y desde luego alimentación y sueño.
Con el fin de preservar la integridad de los alumnos (niños
y adolescentes) debemos desarrollar nuestra empatía, escucha activa atención y
cuidado. También ¿por qué no? Revisar la
salud mental personal (padre-madre, cuidadores docentes) y del equipo de
trabajo, habrá quienes sean mas resilientes, y puedan apoyar a los que aún tiene algunas dudas o problemas para enfrentar las propias
situaciones. Ya que seguramente habrá
quienes tengan serias dudas al tener que asistir presencialmente a dar servicio
y sus angustias sean mayores. Luego entonces en esos casos puntuales, tratar de
sumar la ayuda psicológica.
Aunado al beneficio de volver a las aulas, es necesario
decir que el retorno también será de enorme beneficio en el núcleo familiar, ya
que esto reducirá tensiones familiares que pudieran haber surgido por la
estrecha y constante cercanía.
Estoy emocionada y contenta, preocupada por las condiciones
que estamos viviendo, pero pienso que, tomando las medidas convenientes,
cuidándonos todos, no tenemos por qué preocuparnos.
Y terminando con el inicio
“Los docentes están a
punto de iniciar el ciclo escolar más difícil de su carrera.”
Ellos merecen todo nuestro reconocimiento y empatía, desde
donde podamos apoyémoslos y apoyémonos todos.
Psi. GCuadra