Y ya te lo digo yo, -pero
estoy segura también lo habrás notado tú. -
Terminas de hablar con Mariquita, y ella lo único que te
dijo y te contó fueron puras penas, congojas de su vida, que su pareja ya anda con
otra, que todo el día se siente mal, que todo lo que emprende no le sale, que
nadie La quiere, que le duele todo y no sé cuantas cosas más por el estilo. Su cara ademanes y movimientos por supuesto deben de
estar acorde con lo que te dice, ¿cómo es su cara? Cálida, tranquila, apacible… ¡Noooo claro que
no!
Ahora acuérdate de aquella ocasión en la que platicaste con
Demetria, ella desde que te la encuentras, tiene una cara radiante, sonriente y
tranquila, su aspecto es de felicidad y armonía, lo que ella te cuenta o dice
son cosas positivas, tanto de ella como tuyas, que qué bien te sienta lo que
traes puesto, que últimamente te ve más animada-o de otras veces, que el día está radiante, que
la vida es maravillosa, y cosas por el estilo. ¡Ah pero que gusto es encontrarse a Demetria!
Aquí como en algunas
otras ocasiones, quiero que hagas una pequeña pausa, y me-te hagas el favor de recordar a alguien