Iba a que me leyeran las cartas, mi amigo Alejandro me la
había recomendado, y bueno el era
medico, y por consiguiente para mí de
confiar - científico según yo.
El caso es que llegue un poco tarde –como 10 o 15 minutos
cuando mucho - lo que pasa es que no daba con la dirección pues estaba un poco
enredado, finalmente llegue, una casa común y corriente, me pasaron a una
salita muy feíta -yo pensé - esto de entrada no tiene ni siquiera buena
apariencia- descuidada un solo sillón medio destartalado, muy chiquito el
lugar. Me pasaron casi luego luego, a
una estancia mucho muy diferente de la anterior muy amplia, muy cuidada para
los fines velos figuritas, olores –incienso – música ha doc.
todo muy bien -montado- preparado.
Ella me dijo no te puedo atender, yo brinque inmediatamente-
siempre ha sido así- y ¿por qué no conteste airada? porque llegaste tarde y no me puedo colgar con
mis demás clientes, conteste pero es que